Ha habido veces que la censura por cuestiones morales se ha evitado el estreno de un juego en una zona concreta, evitando que muchos lo disfruten. No me refiero a escenas o contenidos subidos de tono precisamente, sino que a lo largo de la historia tanto en películas, series como en videojuegos ha habido censuras innecesarias para tratar de ajustar algunas entregas para el público infantil a pesar de que el PEGI ya está asignado.
Vamos a nombrar algunas entregas que han sufrido cambios de unas versiones a otras.


En la serie Pokémon siempre ha estado el casino desde que se estrenasen los primeros juegos, pues a partir de la edición Platino se censuró en Occidente para evitar ludopatía en los niños, tratándose de dinero que no existe ni es real. Una pena ya que el minijuego era entretenido cuando lo jugué desde el Plata. Recuerdo que en el mismo Platino habia una escena en la historia en la que habia un atentado en la Zona Safari y eso lo dejaron tal cual.

Siguiendo con la misma saga, Jynx tuvo una polémica ya que su distingida cara oscura se consideraba racista y a partir de Pokémon Oro y Plata empezó a aparecer de color morado.



En Prince of Persia, lanzado para Super Nintendo tuvo una escena en la presentación en la que unos guardias linchan al protagonista y a su padre antes de que Jaffar convoque el reloj de arena delante de la princesa.


En Final Fight, Sega modificó este juego de Capcom en Mega-CD para ponerle más ropa a dos chicas que aparecían de forma picante. En Super Nintendo se cambió estas dos chicas por dos tíos Punk.

El juego de lucha Thrill Kill para PSOne tuvo que ser cancelado por el hecho de ser macabro y que era demasiado violento.

En Super Castlevania IV también para Super Nintendo, Konami editó el juego para evitar que el logo gotee sangre, tapar el desnudo de algunas estatuas y borrar las cruces de las tumbas.


 En Another World, había sangre y desnudos. Por lo que en América se cambió el color rojo a verde y se preocuparon en recortar píxeles en los sprites en los personajes femeninos.

The Legend of Zelda: Ocarina of Time tampoco se libró, porque se tuvo que cambiar ligeramente unos cantos de la música de fondo del Templo de Fuego porque consideraban una ofensa contra los musulmanes y también cambiaron el emblema de la raza Gerudo, al parecerse tanto a la bandera turca.

En Streets of Rage 3 se cambió un enemigo que era homosexual y sin motivo quitaron la entrada principal del juego porque el protagonista daba un puñetazo a la pantalla.

En el nuevo título de Epic Games: Bullestorm, recibió quejas de la psicóloga Carol Lieberman desde la cadena Fox News diciendo que las violaciones están aumentando a causa de las escenas con las que se experimentan en los videojuegos.

En el reciente Fire Emblem Awakening para Nintendo 3DS se lanzó en Japón un pack DLC de un mapa llamado Summer Scramble, entonces en la imagen de presentación, Tharja posa de tal forma que en Norteamérica no les ha gustado y entonces decidieron tapar la posición de las manos con una cortina cutre.

Espero que Nintendo no me haga quitarlo o esconderlo en spoiler.

Estos y muchos más juegos que han pasado de nuevo a los estudios. Antaño apenas había un sistema para recomendar si lo pueden jugar niños o no, ahora está el PEGI que con él se debería de poder publicar según su contenido y siempre y cuando los padres controlen.